domingo, 10 de noviembre de 2013

Y por fin, llegó mi momento!


El camino ha sido largo, más de lo que me hubiera gustado, y ha sido duro, muy duro pero, por fin, después de casi dos años, ha llegado mi momento! He encontrado trabajo!

La espera ha merecido la pena porque empiezo un nuevo ciclo de mi vida en una empresa del sector químico, o sea mi sector,  con unas condiciones muy buenas para empezar, en una empresa, que se preocupa sinceramente por el medio ambiente y por sus trabajador@s, y en Vigo!



Sólo me queda dar las gracias a todas esas personas que me han apoyado incondicionalmente, personas de mi familia, amigas, conocidas y todas aquellas que he conocido durante el largo camino, y que también han tenido una gran importancia para mí en este proceso.

También a iniciativas como No Quiero Ser Portada de Los Lunes al Sol (NQSPLS) por la difusión que han hecho de mi perfil y por la gran labor que hacen, y a todas esas organizaciones sin ánimo de lucro que imparten cursos de formación, como la Rede de Mulleres Veciñais que enseñan a las personas a adaptarse a las nuevas maneras de buscar trabajo, a actualizarse y a compartir, conocimientos y experiencias.

Espero algún día poder devolver a estas personas, a esta sociedad o al mundo, todo aquello que me han dado sin esperar nada a cambio, por la generosidad, el cariño y la paciencia demostrada.

Empiezo con muchas ganas y fuerza, con ilusión, y con la intención de dar el 200%, de aprender, de mejorar, de evolucionar y de seguir creciendo personal y profesionalmente.  Y que dure mucho!

 
Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

 

miércoles, 11 de septiembre de 2013

La aventura del Plan PREPARA


Vuelta al cole y vuelta a la búsqueda de empleo después de un respiro vacacional. Y este mes de septiembre lo empiezo con el itinerario del Plan Prepara. Hoy ha sido mi primera cita y ha consistido básicamente en un cuestionario sobre mis estudios, mi vida laboral y mi forma de buscar trabajo, cómo, cuándo, dónde, etc.

He leído entre líneas y he sacado mis propias conclusiones de esta cita-entrevista, y, mis conclusiones son que mis “supuestas” opciones más realistas, son emigrar o autoemplearme, porque además de lo mal que está el mercado laboral, al llevar más de año y medio sin trabajar, cada vez tendré más dificultad para reincorporarme al mercado, porque ya no estoy actualizada.

Este es el mensaje que entiendo que se nos quiere transmitir desde las Administraciones Públicas, completado con perlitas del estilo de: “en otros países hay trabajo, de momento”, “se abren negocios constantemente, no puede ser tan difícil hacerlo”, “muchas personas abren empresas sin estudios universitarios ni estudios de viabilidad”, “pues si llevas año y medio así y nada, puedes seguir esperando o bien pensar en las opciones que te planteo”



¿Debemos sentirnos culpables por no querer emprender o por haber pensado en ello y no hacerlo? ¿Debemos culparnos por no emigrar en condiciones precarias y para no ejercer nuestra profesión sino un minijob? ¿O castigarnos por no jugárnoslo todo a cara o cruz?

¿Se puede ser más cruel? ¿Desde que posición se dirigen estas personas hacia otras que estamos realmente dejándonos la piel, sufriendo, viendo reducidas continuamente nuestras posibilidades de trabajar y que cada vez vemos menos resultados?

Ya no se tienen en cuenta las preferencias ni las necesidades de las personas, si tenemos familia, o si simplemente preferimos renunciar a un salario por quedarnos en nuestra tierra, al lado de los nuestros, ¿será que nos hemos olvidado del artículo 35.1 de la Constitución Española? Todos los españoles tienen el deber de trabajar y el derecho al trabajo, a la libre elección de profesión u oficio, a la promoción a través del trabajo y a una remuneración suficiente para satisfacer sus necesidades y las de su familia, sin que en ningún caso pueda hacerse discriminación por razón de sexo”.

Sin palabras.

 
Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

lunes, 29 de julio de 2013

Una ilusión rota


Después de un año y medio sin apenas llamadas ni entrevistas de trabajo, hace unas semanas apareció la que pensé era mi oportunidad.

Pues aunque creía que no funcionaba, me llamaron del mismísimo INEM para presentarme en un plazo de dos horas para informarme de un proceso de selección para un puesto de Encargado de Obra, cuya contratación formaba parte del Plan de Empleo 2013 de Vigo, y concretamente al programa “Vigo Emprega

Este Plan de empleo promovido por el Ayuntamiento de Vigo, consiste en la contratación de 122 desempleados para ocupar puestos de capataces, oficiales de carpintería, albañilería, electricidad, cantería, conductor-palista y peones entre otros, y que digo yo, que perfectamente se podría denominar “Vigo Emprega Homes” porque absolutamente todos los puestos ofertados están clara y profundamente masculinizados y arraigados a hombres, y vale que pueden ser las necesidades actuales del Ayuntamiento, pero que lo vendan como que, cito textualmente “El programa es un instrumento elaborado para promover el empleo en el municipio, prestando especial atención a todos los colectivos que tienen dificultades para integrarse laboralmente” (Bases reguladoras, punto 2), pues no cuela, no, ¿acaso las mujeres no somos un colectivo especialmente perjudicado por la crisis?
 
 

En mi caso particular, como Jefa de Obra, profesión que por cierto no existe en los filtros de las oficinas del INEM, evidentemente, no me ajustaba al puesto de Encargada de obra, y así me lo hicieron saber al entregar toda la documentación que tuve que reunir, (certificados, contratos, título, diplomas…y así una larga lista de burocracia) con un simple: - Olvídate.

Reconozco que a pesar de que finalmente el puesto no fue para mí, en cierto modo agradezco la sinceridad del personal que gestiona dicha selección, porque si la esperanza era grande, a medida que pasara el tiempo hubiera sido mayor, y consecuentemente más grande el bofetón al volver a mi rutina, después de haber perdido tiempo, dinero y energía en un proceso que antes de empezar, ya prescindía de mí.

Y así, sin más, volví a mi búsqueda de empleo, con un poco menos de energía pero si cabe, con más fuerza e ilusión.


Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

martes, 18 de junio de 2013

El otro lado bueno de la crisis


El anterior post "El lado bueno de la crisis" ha tenido una gran acogida, bastantes comentarios, y muchos ánimos en todas direcciones, y es que, realmente, necesitamos más que nunca, oír, ver y tocar cosas positivas, pues ya bastante negatividad nos rodea diariamente. Por eso, quiero seguir el post anterior, enunciando otros 5 factores positivos que podemos aprovechar los desempleados en esta crisis:
 
1.      Dedicar el tiempo a lo que te gusta. Por fin puedes estudiar cualquier cosa que te guste, aunque no tenga nada que ver con lo que hayas hecho hasta ahora, puedes descubrir hobbies que tenías escondidos, hacer deportes que habías abandonado y recuperar aficiones para las que no tenías tiempo!
2.      Poder hacer un día cualquiera una cosa cualquiera. Exactamente eso. Un día te levantas más tarde o te acuestas más tarde, otro día te haces una escapada a la playa, o al monte, o al cine, o quedas con una amiga, y te sales un poco del guión, de la monotonía y de los horarios, porque, aunque la búsqueda de empleo es un trabajo en sí, no hay un horario fijo, y tú misma estableces cuando es sábado y cuando no. J
3.     La conciencia social. Es increíble de qué manera se han unido las personas por y para causas propias y ajenas, auténticos desconocidos unen sus manos con fuerza, lloran, gritan, defienden su integridad y luchan por un mundo más justo, y lo hacen JUNTAS. Personas de todos los colores, edades, ámbitos e intereses, sin barreras y sin fronteras, que para bien o para mal, sin esta crisis no se habrían unido nunca.
4.      Poder dedicar tiempo ti misma. A conocerte, a descubrirte, a reencontrarte, a reorientarte, a reiventarte, y si quieres, hasta a cambiar de vida. Si no quieres cambiar de vida, por lo menos, has tenido el tiempo y la oportunidad para ser consciente de lo que eliges.
5.     Compartir. La necesidad imperiosa de compartir. Experiencias, sentimientos, conocimientos, sensaciones, impresiones y también artículos, materiales, fotos, vídeos... Compartir tu tiempo, que al fin y al cabo, es lo más valioso que una tiene, algo tan valioso, que no se puede pagar, que nadie te puede robar y con lo que ni siquiera se puede especular.
 
Hay mil cosas positivas en nuestro día a día, que a veces no podemos o no sabemos ver, y por eso, y aunque seguro que hay muchas más, aquí os dejo un recopilatorio con una canción que espero que os anime el día, y sobre todo ¡¡¡Actitud Positiva!!!
 

 
Catalina Pahino Dasilva
Ingeniera Técnica Química

viernes, 31 de mayo de 2013

El lado bueno de la crisis

Pues sí, sí que lo hay. Aunque la primera impresión sea pensar que esto es una locura, que no hay nada positivo en que seamos 6 millones de parados, que este es un país de pandereta, y, que los políticos y los corruptos siguen en la faz de la tierra como si nada, puedo afirmar que sí, sí hay un lado bueno en esta crisis.
 
Pero empecemos por el principio. A todas nos ocurre, cuando empezamos con nuestra búsqueda activa de empleo, que nos vemos encerradas entre 4 paredes, solas y con una cierta sensación de angustia y/o miedo a lo desconocido, al qué pasará, al qué encontraré ahí fuera en el mercado laboral, cuándo lo encontraré, cómo…
 
La primera reacción es ponerse a buscar empresas con la lista del Ardan (si la consigues), imprimir miles de currículos y estar todos los días en Infojobs viendo e inscribiéndose a toda cuanta oferta hay, sea de lo tuyo o no, total, no cuesta nada hacer un clic de ratón, así habrá más posibilidades de que algún día caiga algo (aunque yo creo que más bien lo que ocurre es que los seleccionadores en cuanto ven tu candidatura piensan “joer ya está otra vez esta pesada…”).
 
Y de repente llega un buen día, en el que descubres todo un mundo que estaba escondido, un mundo en el que hay personas de verdad, apoyo moral, tertulia, risas, aprendizaje, empatía, libertad, solidaridad, respeto, alegría, (podría seguir hasta el infinito)… y, en definitiva, compañer@s del camino de un pedazo de tu vida.
 
En mi caso, gran parte de esto, me lo han dado los medios sociales, los amigos y amigas virtuales. Al principio no me creía cómo podía hablar con gente que no conocía ¡y me respondían! Luego, rompiendo fronteras, empecé a hablar y a debatir con personas de otros países, profesionales de muchos y muy variados sectores y edades, que escuchaban mis palabras en un ambiente de igualdad y respeto. Pero ya fue lo más de lo más, cuando empecé a recibir felicitaciones y ánimos, públicos y a través de mensajes privados, para seguir con el blog, con el trabajo en las redes sociales, y transmitiéndome un optimismo brutal, con frases como que algún día encontraría mi recompensa y que por supuesto sería un buen trabajo.
 
Algunos de esos amigos y amigas se han desvirtualizado, y otros, simplemente se han virtualizado tras nuestra relación en persona, ya que hoy en día el contacto sigue a través de estos canales de comunicación también.
 
 En un día a día de estas características, es imposible sentirse sola, y sólo me puedo sentir como cuando crece algo tan verde en medio de tanto asfalto tan negro. ¡Gracias amig@s!
 
 
Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química
 
 
 
 

domingo, 5 de mayo de 2013

El oro y el moro de la mina de Corcoesto


Vuelve a azotarnos una inversión y una oferta de puestos de trabajo asociada a una catástrofe natural, especuladores financieros y un beneficio totalmente ajeno a nuestras tierras.

Mineira de Corcoesto, la filial de la gran empresa canadiense Edgewater Exploration, quiere explotar una mina de oro olvidada y situada en un paraje natural a 130 metros de una zona protegida del río Anllóns, que desemboca en la costa da morte y en la zona de O Roncudo, donde se recogen los mejores percebes del mundo. Lo que sucede es que el método de extracción supone emplear y extraer materiales tóxicos como el cianuro de sodio o la arsenopirita.
 
La explotación de esta mina de oro crearía 271 puestos de trabajo, por lo que existe un gran enfrentamiento entre la población de la zona, que están a favor y en contra de la misma.




No voy a ser hipócrita, y confesaré que envié mi currículo a la ETT encargada del proceso de selección, por si tenía un hueco entre los 271 puestos, pero la gente de la zona tiene prioridad a la hora de ser contratada, y evidentemente no me han llamado. Además el Ayuntamiento de Cabana de Bergantiños se ha prestado a recoger currículos de los vecinos, y su alcalde no quiere aclarar la relación que le une a la empresa explotadora para colaborar de esta manera en el proceso de selección.

Según varios estudios, ya estamos utilizando más del 50% de lo que el planeta puede producir y para el año 2030 necesitaríamos 2 planetas para la supervivencia de la población mundial y estamos padeciendo los resultados del cambio climático continuamente, con temporales extremos, terremotos, tsunamis e incoherencias de temperaturas en cada estación, y aún así, ¿merece la pena esta mina de oro por 271 puestos de trabajo? ¿Estamos matando moscas a cañonazos? ¿Debemos seguir en esta línea de destrucción de los recursos naturales que ofrece un parche a corto  y trágicas consecuencias a largo plazo?

Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

viernes, 5 de abril de 2013

El “presunto” engaño de Eurovegas


           Este post surge de una breve recopilación de ideas (entre ellas la mía) de un grupo de debate en el que partidarios y detractores de este proyecto, opinamos sobre el Inicio de las obras en Eurovegas. El tema ha dado (y sigue dando) mucho de sí, y el debate ha estado calentito.

Los partidarios evidentemente ven una inversión, una oportunidad de trabajo, a corto, medio y largo plazo, para la gente y los comercios de la zona, que generará turismo, como en Las Vegas (se atreven a decir que “todos los que hemos ido por allí hemos visitado los casinos”), e incluso hay propuestas para simplificar o eliminar leyes y reducir impuestos, para acelerar “este gran complejo” que significará un gran impulso para la población de Alcorcón y la economía española, y así animar a otros inversores a venir a España…

 
Los detractores pensamos que es un engaño en toda regla.
 
Ø Si se llegan a realizar dichas obras, ya que se duda en el artículo “Eurovegasadvierte múltiples riesgos que comprometen sus proyectos futuros”, serán los peces gordos quienes se las lleven, grandes constructoras, que subcontratarán a otras empresas bajo unas condiciones extremas, de precio, plazo y forma de pago (y hablo de pagar a más de 180 días saltándose cuantas leyes de morosidad existan). Entoces, ¿qué tipo de empleo se generará y a qué precio?

Ø Si se modifican las leyes, cosa que ya se ha empezado a hacer (“isla legal”), serán como siempre para beneficiar a unos pocos y seguir jodiendo al resto, con perdón.

Ø En el caso del comercio local y del impulso económico de la zona, ¿quién se cree que este complejo comprará y consumirá en tiendas de barrio?

Ø ¿Qué clase de turismo podrá atraer? ¿Acaso no es preferible un turismo gastronómico, paisajístico, cultural en lugar del turismo de Salou?

La última, es que han habilitado una página web (eurovegasempleo.com) en la que tras poner tus datos, CV y carta de presentación, te responden amablemente: “WEB EN MANTENIMIENTO DISCULPEN LAS MOLESTIAS”; paradójicamente hay fuentes que confirman que ya hay quien está empezando a aprovechar el tirón y que ya existen pisos en alquiler para alojar a los trabajadores.

Bienvenidos a la burbuja Eurovegas.

Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

martes, 19 de marzo de 2013

¿Qué más podemos hacer los desempleados en esta crisis?

            No he parado de leer artículos sobre qué hacer cuando estás sin empleo, que si formarse, hacer deporte, tener unos hábitos, madrugar, ser optimista…

Muchas personas como yo, estamos empezando a estar cansadas de este tipo de posts, pues cada vez que los leemos sentimos que estamos haciendo todo lo que nos recomiendan y sin embargo no obtenemos los resultados que nos gustaría a cambio de ese gran esfuerzo y optimismo…
 

 Actualmente hago dos cursos online de Community Mannagement, uno presencial de edición de vídeo, asisto dos veces por semana a clases de inglés, voy al gimnasio y a clases de salsa, soy representante de una vocalía en la Asociación Vecinal de mi barrio, colaboro en otras dos asociaciones, intento tener actualizadas y trabajar en mis redes sociales y este blog, no he cesado en mi búsqueda activa de empleo y asisto a todas las charlas, conferencias y ferias relacionadas con el empleo.

El domingo pasado mientras corría en la cinta en el gimnasio, empecé a pensar qué era lo que estaba fallando y qué más quería de mí, de nosotros, esta sociedad, o ese empresario o empresa que todavía NO nos ha llamado para contar con nosotros en su equipo después de todo lo que hemos hecho y trabajado, y cada vez corría más deprisa, a más velocidad y con más energía, hasta que se me ocurrió escribir este post.

De repente, me dí cuenta de que no podía respirar porque estaba dando demasiado a todos los niveles.


Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

domingo, 24 de febrero de 2013

¿Existe igualdad de género en el mercado laboral actual?

            Esta semana, estoy un poco enfadada, y después de meditar durante unos días si tratar o no este tema, he decidido arriesgar y lanzarme.

Pues bien, el caso es que no hace mucho encontré una oferta de trabajo en la que pedían un ingeniero/a técnico industrial con un par de años de experiencia para una empresa del sector ambiental y alguna característica más que no recuerdo, pero lo que sí recuerdo es que me vi identificada en aquel perfil. Me puse en contacto con una persona de la empresa y me recomendó que no presentara mi candidatura porque era un puesto “feo y sucio” y estaba más bien, orientado a un perfil masculino. Lo que voy a decir ahora es muy grosero, pero tengo que decirlo, y es que tengo bastantes más pelotas que muchos de los ingenieros que conozco, y no precisamente físicas. ¿Cuándo nos dejarán elegir si un puesto es sucio, feo, duro o inadecuado para una mujer?
 

Creemos que las cosas han avanzado mucho en los últimos tiempos, pero nada más lejos de la realidad; hace unos días, @Yoriento publicaba un artículo basado en un estudio de Harvard que demostraba la “Discriminación de género en las entrevistas de trabajo” y uno de los factores relevantes en la elección del candidato masculino era el componente inconsciente del seleccionador, por cuestiones de cultura, contexto y/o la educación recibida.

Un día antes se publicaba otro artículo en Faro de Vigo con este titular: “Aumenta la brecha salarial entrehombres y mujeres”. El estudio de UGT revelaba que aunque habían aumentado las incorporaciones femeninas al mercado laboral, los empleos eran parciales, más precarios y con menor retribución, lo que implica menores pensiones y prestaciones.

Pues bien, el debate está abierto, no me creo mejor ni peor que un hombre, pero sí creo que tengo derecho a tener las mismas oportunidades, salario y condiciones laborales que ellos, pues mi formación, esfuerzo y dedicación SI son los mismos.
 
¿Es o no un tema controvertido? Pues venga, os animo desde ya a dejar vuestras opiniones.


Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

jueves, 14 de febrero de 2013

Formación en tiempos de crisis: ¿Oportunidad o negocio?


Este último año, he descubierto que hay bastantes organizaciones sin ánimo de lucro dispuestas a apoyar, fomentar y ayudar a las personas que quieren formarse y aprovechar el período de desempleo para reorientar o completar su carrera profesional, pero también me he percatado de  que existen otras empresas, que han visto una gran oportunidad de negocio en el campo de la formación y que están dispuestas a hacer de ella un uso ilícito, incluso ofreciendo oportunidades de “empleo” directamente vinculadas a las ofertas formativas que promueven, o mejor dicho, que venden. Con una clientela de casi 6.000.000 de personas, un volumen de mercado bastante goloso, aprovechan la vulnerabilidad (y en algunos casos la desesperación) de las personas que queremos trabajar.

La “Rede de mulleres” de Vigo va por la tercera edición del curso de 40 horas presenciales “Búsqueda de empleo Web 2.0 y marca personal” impartido por Eva Ventín, del que, alrededor de 12 mujeres por edición, nos hemos beneficiado gratuitamente, y que hoy en día, es muy productivo para centrar la búsqueda de empleo y aprovechar canales no tan explotados como los ya obsoletos portales de empleo o la puerta fría. Pero la cosa no ha quedado ahí, pues tras la segunda edición, la Red creó una bolsa de empleo virtual y con mucho esfuerzo consiguió publicarlo en prensa. Este caso lo podríamos catalogar como una clara OPORTUNIDAD.

 

Ha aumentado estrepitosamente la oferta formativa en el ámbito de la web 2.0, cursos de blogs y webs, E-commerce, Community Management, posicionamiento en buscadores, experto en Social Media… No sé si estas nuevas corrientes profesionales tendrán futuro o si podrán soportar la gran oferta de profesionales que habrá de aquí a unos años, pero desde luego no existe regulación alguna en salarios y titulaciones, muchas empresas no saben ni siquiera de qué hablan aún cuando demandan estos perfiles, e incluso se habla de una “burbuja” como se expone en el artículo del país “Sí hay burbuja: Se llama community manager" ¿Será un NEGOCIO?

Curioso es también, dentro de esta tendencia de deshumanizarlo todo, el gran aumento de cursos online, gratuitos o no, que sin duda deben dar buenos resultados a nivel económico por la reducción de coste que supone prescindir de personal docente, por lo que me atrevo a decir que esto sí podría denominarse como un NEGOCIO. Entiendo la picaresca y la visión estratégica de una empresa o empresario que enfoca su negocio aquí, también están en crisis y deben buscar su lugar, pero ¿Qué pasa con los organismos públicos o semi-públicos? Los cursos presenciales ¿no serían una manera de crear empleo y al  mismo tiempo ofrecer un servicio en el que nos podamos seguir desarrollando profesionalmente? Seré una antigua y sé que hay que adaptarse a las tecnologías, y de hecho me encantan, pero donde haya un buen o una buena docente enseñando una buena materia, no tengo ni la más mínima duda de que lo prefiero.

Alrededor de los idiomas, se ha formado también un gran mercado, pero en este caso provocado bien por la necesidad de emigrar, o bien por la necesidad de diferenciase y tener más opciones a la hora de acceder a un puesto de trabajo, pues no se puede obviar por ejemplo, el aumento en internacionalización que han experimentado las empresas españolas, por lo que últimamente se han demandado puestos orientados al mercado exterior, que por supuesto, requieren dominar idiomas. En los últimos meses he cursado el A2 de francés, iniciación de alemán y actualmente estudio el B1 de inglés, pero no he encontrado ningún curso gratuito de ningún idioma.

Me pregunto qué pasará cuando acabe la crisis, empiezo a plantearme si se sustituirá el “desplome del ladrillo” por el “desplome de la formación”…
 
Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Industrial

miércoles, 30 de enero de 2013

Quiero emprender y no puedo!


Supongo que a estas alturas, y a raíz del anterior post, muchos ya habéis adivinado de qué se trata la otra opción que me planteé después de unos meses como desempleada: ser emprendedora.

Hace poco, viendo en streaming la ponencia “Empleo 2.0: no busquesoportunidades, haz que te encuentren” del coaching Alfonso Alcántara (@Yoriento), me llamó la atención cómo contaba que muchos decimos que “no emprendemos porque no tenemos dinero”, y haciendo gala de su profesión, como buen coach, eliminaba el obstáculo, y lanzaba una pregunta a los futuros emprendedores:
 
-Y si tuvieras el dinero, ¿qué harías? A ver si luego te lo vas a gastar en PortAventura…

Pues yo lo tengo clarísimo, o por lo menos lo tenía hasta que me dí de bruces con la realidad. Hace tiempo que una idea me ronda por la cabeza, y con el tiempo se ha ido madurando hasta tal punto que ya me he decidido por el sector (que no conozco muy bien como empresaria pero sí como clienta), tengo claro el nombre del negocio, el logo, la imagen y el local; la forma de la sociedad y los canales de distribución; la definición del producto y el precio de coste y de venta; e incluso, la inversión aproximada necesaria. Bien, pues “sólo” me falta un socio, un inversor o un prestamista, ¿fácil no?

Últimamente comenzó en los medios y en la sociedad la fiebre del emprendimiento: que si es una forma de “autoempleo”, “la crisis es una oportunidad para emprender”, “ayudas, préstamos y subvenciones para emprendedores”, “oficina del emprendedor” y la última apuesta de este nuestro gobierno “cuotas de jóvenes autónomos a 50 euros”.
 
Después de pasar por 4 entidades públicas y 1 privada buscando orientación, el resultado en las cuatro primeras fue de incompetencia y desconocimiento total, así como un asesoramiento vago, superficial y vacío de contenido; ahora sí, ya había dado un paso atrás por el miedo adquirido tras escuchar cuatro términos técnicos empresariales y saber la cantidad de burocracia sin sentido a la que tenía que hacer frente para emprender, y, la cosa empeora si quieres pedir alguna subvención.

En la entidad privada fue otra historia, se notaba que realmente se dedicaba a nuevos negocios, empresas, pymes y emprendedores, pero en la vida real y en los tiempos convulsos actuales, ¿problema? sólo dos sesiones gratuitas, el resto de asesoramiento sería previo pago.

En la quinta Administración Pública me ofrecieron un tutor para elaborar el plan de empresa, y tras una reunión en Santiago, tardaron casi dos meses en adjudicármelo, pero para entonces, ya no tenía tan claro lo de emprender.

Yo ya sabía que si quieres montar un negocio necesitas dinero para la inversión, pero visto lo visto, también lo necesitas para elaborar un plan de viabilidad, para el asesoramiento a la hora de abrir el negocio (pues con tanto trámite burocrático es fácil olvidar algún papel), y por último, también necesitas un colchón económico para sobrevivir, por lo menos el primer año, ya que, probablemente no obtendrás beneficios pero tendrás que seguir haciendo frente, puntual y religiosamente, a tus cuotas de autónoma, tu hipoteca y  todas a tus obligaciones económicas.

Con todo esto me planteo ¿Cuánto valen nuestros sueños? ¿Qué precio tiene tu emprendimiento? ¿Cuánto se arriesga en realidad? Y vuelvo a la misma encrucijada del post de Alemania: ¿Se resumirá todo a una cuestión puramente económica?

No quiero acabar este post sin abrir una ventana que arroje un rayo de luz y esperanza, y esta vez lo voy a hacer con un vídeo, que un día cualquiera de una semana cualquiera, mi prima me envió para animarme.
 
 

jueves, 17 de enero de 2013

Crisis, Ingenieros y Alemania


Cuando habían pasado ya varios meses de mi inicio en la búsqueda activa de empleo y viendo como el mercado de la oferta y la demanda se presentaba desolador, empecé a plantearme otras opciones que, en principio había descartado por comodidad, aunque después de estudiarlo y meditarlo, llegué a la conclusión de que no, no era comodidad, sino la falta de recursos económicos que dichas salidas requerían.
 
La primera opción que me planteé fue emigrar. Y en mi caso lo tenía claro, ¡Alemania es la cuna de la Ingeniería! ¿A dónde iba a ir si no?
 

Los últimos datos estadísticos oficiales revelan que en el primer semestre del 2012 la emigración española a Alemania aumentó en un 53% respecto a las cifras de 2011, continuamente vienen reclutadores alemanes a nuestro país con numerosas ofertas de trabajo, y, nos hemos cansado de ver infinidad de programas del estilo de "Españoles por el mundo" donde se muestra lo felices y afortunados que son 4 ó 5 españoles emigrados y “elegidos al azar” (una muestra no muy representativa). Pero contrariamente, con relatos como el post de Rosalía Sánchez, "Diez cosas que debes saber sobre Alemania", que por cierto ha tenido bastantes críticas, o el impresionante y demoledor artículo de eldiario.es, "La pesadilla de los jóvenes que soñaron con Alemania", el sueño alemán se desmitifica por completo, y tengo que decir que, aunque no he vivido ni trabajado en Alemania, estos últimos textos me ofrecen bastante credibilidad.  

Pues bien, el primer hándicap que tenemos los españoles, es el idioma, no sólo no aprendemos un idioma distinto de la lengua materna, sino que el alemán hasta hace poco no lo podías aprender ni pagando. Somos muy valientes con nuestro nivel “medio” de inglés, pero si buscas un trabajo especializado en Alemania, que son los perfiles que más se demandan, necesitas hablar alemán, y después de un curso básico que hice este verano, puedo decir que minusvaloramos el idioma y no sabemos hasta qué punto.

Si lo que buscas es un trabajo que no necesite preparación académica, no es ningún secreto la existencia de los famosos mini-jobs, pues en Alemania no existe salario mínimo legislado, y esto se agrava en el sector servicios, donde han aumentado los casos de españoles que han trabajado durante meses sin contrato laboral y sin cobrar.

Todo esto sin mencionar los numerosos trámites burocráticos que hay que realizar para poder alquilar, trabajar y vivir allí (que no son pocos), la adaptación al clima, a las costumbres, a la cultura de trabajo, o, a algo tan sencillo como las horas de luz solar.

Por último en el desolador artículo de eldiario.es se destapa una realidad de precariedad y explotación en Alemania que creo que deberíamos tener muy en cuenta, tanto por la naturalidad con la que te ofrecen un piso patera para vivir, como con la que te dejan totalmente desasistido en cuestiones de salud, o como que el salario de un arquitecto sea 300 euros sin contrato y haciendo horas extra. Vale que la ciudad adecuada no sea Berlín, pero eso no significa que debamos asumir unas condiciones laborales lamentables porque es una ciudad de estudiantes, cool y haya buenas fiestas.

Mi conclusión de todas estas historias reales de gente real, es que sin un buen colchón económico no se puede uno plantear buscarse un futuro mejor en la “cuna de la ingeniería” porque si las cosas no te salen bien habrás perdido algo de dinero, un pedazo de tu vida y un poco de energía en la búsqueda de tu meta; pero también es cierto, que el que no arriesga no gana, y que, si te sale bien, habrás ganado una experiencia única, valor, y quien sabe, quizás tu objetivo en la vida. 

Y tú, ¿emigras?
 
En próximos posts desvelaré el resto de opciones que plantearse en estos tiempos convulsos…

 
Catalina Pahino
Ingeniera Técnica Química

 

martes, 8 de enero de 2013

El desempleo y su cuadro clínico

A menudo los desempleados de larga (y no tan larga) duración sufrimos una pérdida de identidad acompañada de una crisis existencial y una bajada de autoestima.

Cuando hace un tiempo vi en Documentos TV el documental titulado “¿Generación perdida?”,  me dí cuenta de que no era la única que presentaba estos síntomas, sino que éramos, y somos muchos, los que presentamos este “cuadro clínico” en esta situación.

Pero ¿por qué nos pasa esto?

Estoy a punto de cumplir 30 años, mi generación es una de las más preparadas académicamente, hemos crecido en tiempos de bonanza y hemos tenido de todo durante años, y  sin embargo, ahora, tenemos trabajos más precarios que nunca, una tasa de desempleo que duplica la media europea, y además nos enfrentamos a un mercado laboral difícil, complejo y con muy pocas oportunidades.

Ahora volvamos 10 años atrás. Al terminar el instituto, o incluso sin haber ido, con 18 años o antes, siendo un adolescente, había que decidir si estudiar o trabajar. ¿Cómo lo decidíamos? Pues para responder a esta primera cuestión, recurriré a este documental que pone como ejemplo la construcción, a la que muchos jóvenes se aferraron por la “seguridad” laboral y económica que el sector les aportaba, renunciando así a estudiar para beneficiarse de un buen salario producto de la especulación inmobiliaria. Hoy en día, hay un arrepentimiento generalizado de estos jóvenes por no haber estudiado, y reconocen no encontrar salida después del desplome del ladrillo.

Pero ¿que ha pasado con los que decidimos estudiar? ¿Y con los que tras haber estudiado hemos trabajado en ese sector? Pues que en cierto modo tampoco encontramos ninguna salida, y, en mi caso, como Ingeniera Química con experiencia en el sector de la construcción, aparece el primer síntoma del cuadro clínico: la pérdida de identidad.

Tras casi 4 años en el sector y sabiendo que está en pleno decrecimiento, lo primero que te preguntas es ¿Pero quién soy? ¿Soy ingeniera? ¿Química? ¿Profesional de la construcción? ¿Para qué soy ahora válida? ¿Cuál es mi futura profesión? ¿Qué es lo que quiero? ¿Qué me gusta? y ¿qué es lo que hay? Y la mayoría de estas preguntas sin respuestas, sobre todo la última, te arrastran directamente al segundo síntoma: la crisis existencial.

¿Qué he hecho durante estos años? ¿He aprovechado el tiempo? ¿A qué aspiro en este momento carente de oportunidades para el desarrollo profesional y el consecuente desarrollo personal? ¿Qué haré con mi vida?

Pues sí, todo preguntas e incertidumbre, pero es el momento de descubrirse a uno mismo y de reinventarse, después de seguir una inercia laboral durante años en las vacas gordas, te replanteas y te cuestionas muchas cosas, y quien consiga superar esta fase, estoy convencida de que conseguirá sentirse realizado y pleno, pero si por un período de tiempo no lo consigue, aparecerá el tercer y último síntoma y, a mi parecer, el peor: la pérdida de autoestima.

A este último no podemos llegar. El hecho de no tener un trabajo no significa que seamos malos profesionales o que no valgamos para nada, hay que ser realistas y saber que en el contexto actual hay escasas oportunidades y lo mejor que podemos hacer es trabajar en la búsqueda activa de empleo, que precisamente, no es otra cosa, que un trabajo.
 
Así que animo a tod@s los que estáis en esta situación a no desesperar y a que no os dejéis vencer por este cuadro clínico, empezad ya con el tratamiento preventivo que no es más que trabajo, trabajo y trabajo.